lunes, 27 de abril de 2020

Indeleble

Me pregunto si existieron palabras
que le hicieran justicia a tu belleza,
a tus ojos de capuccino
engarzados en tacita de porcelana,
siempre nocturnos
y llenos de luciérnagas,
intemporales con el reloj de la historia,
irresistibles a quien te mirara.
Quién podía no sonreír 
con la anécdota que contaras,
quién podía no enamorarse
de tu pestañeo mitad ingenuo,
mitad soberbio con los mortales.
Princesa de la familia,
de la época,
del mundo a tus pies
detrás de la barra.
Me pregunto si existieron palabras
que le hicieran justicia a tu inteligencia,
heroína inocente
de una vida demasiado real
exhalando fragilidad
desde tus ojos, desde tus manos...
Quién podía no ser marcado
por tu pintura, tus letras
y la convicción de tu voz
contando tu cuento de hadas.

Dedicado a Chichita, mi amiga.
Raquel Nieto
28/02/2020