Amor entre comillas
que al balcón de dos versos perdidos
con letras minúsculas se asoma
a esculpir detalles de barroco
en tres besos, separados por comas.
Amor en mis orillas
que desarmado y sin asteriscos
desafiando la insistencia de una duda
acentúa su osadía y se debate
con los garfios de mil signos de pregunta.
Amor de manecillas
que marcando ciclos de punto seguido
me convierte en reloj de sus horas
si entre paréntesis me encierran sus manos
y entre engranajes recorro su historia.
Amor de mieles y semillas
que en la búsqueda de un código escondido
sólo pide un deseo y me jura
si susurro esa palabra en sus oídos
muy despacio robará todas mis plumas.
Y tras guiones dialogando intermitentes
mi respuesta es un 'sí' entre gemidos
que no tengo ningún miedo a la memoria
si tu amor es una gota de presente
en la promesa de mis puntos suspensivos...
